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Aidé Partida

Intervención Museo del Louvre

El museo es un lugar sagrado para la sociedad del arte, donde por mucho tiempo se ha criticado el qué entra o qué no, la apropiación de un espacio de unos cuantos centímetros (10x14 para ser exactos) en un recinto tan sacralizado e importante como lo es el Museo del Louvre en París no fue tarea fácil, pero me permitió conocer la reacción de visitantes que en definitiva están ahí dentro para ver arte. La pieza ‟intrusa” era algo pequeño pero totalmente fuera de contexto: la fotografía de un niño Wixarrika (grupo indígena de México). La impresión fue colocada en un espacio destinado para exposición que por el momento se encontraba vacío, se realizó registro visual y anotaciones del comportamiento de las personas frente a la intervención por un periodo aproximado de veinte minutos, después la pieza fue abandonada a su suerte.